El Barcelona ha rechazado los informes de que los miembros de la junta directiva estén utilizando las tarjetas de crédito del club para disfrutar de una vida de lujo a expensas de los socios.
Hace doce días, un artículo en Deporte Afirmó que las tarjetas de crédito del club estaban ’emitiendo humo’, debido al uso de las mismas para gastos que no son precisamente imprescindibles. Ese artículo señala que no concuerda exactamente con los recortes y las medidas de austeridad implementadas en otras partes del club.
Ese artículo continúa diciendo que cuando el expresidente Sandro Rosell estaba en el cargo retiraba las tarjetas de empresa a los directivos, y no utilizaba coches particulares con cargo al club, salvo obligación.
Como parte de su derecho de respuesta, Sport ha publicado una nota del club, en la que afirma que ningún miembro de la directiva tiene una tarjeta Visa personal facturada al club. También recuerdan que los departamentos internos del club tienen bajo estrecha supervisión las tarjetas visa del club.
No es la primera vez que aparecen informes sobre el gasto de fondos del club en beneficios laborales. A menudo, los negocios del club tienden a realizarse en el restaurante Via Veneto, en una zona rica de Barcelona, y la comida y el vino se pagan más en el asador. La comparación entre Rosell y el actual presidente Joan Laporta toca una profunda herida en la política del club barcelonés que ha definido a la entidad durante las últimas dos décadas.
Nota oficial:
El FC Barcelona desea dejar constancia de que bajo el mandato de la actual Junta Directiva, no existe ningún directivo o directivo que tenga alguna tarjeta VISA a su nombre, ni a su disposición. Además, las tarjetas VISA que existen en el club están perfectamente controladas y supervisadas por los departamentos internos del club y, en ningún caso, se sobreutilizan. De hecho, sus políticas de uso están en línea con el ahorro y la austeridad que sigue actualmente el FC Barcelona.