BRUSELAS – Italia ahora está dando largas al último tramo de la emblemática reforma migratoria de la UE, después de que Alemania aceptara un compromiso largamente esperado.
Durante una reunión de ministros del Interior de la UE, Roma, en una inesperada medida de último minuto, dejó en suspenso una decisión sobre la llamada regulación de crisis, aplastando las esperanzas de llegar a un acuerdo al final del día.
Sin embargo, la jefa de Asuntos Internos de la UE, Ylva Johansson, garantizó que los embajadores de la UE firmarán el acuerdo en los próximos días.
“Estamos muy cerca de encontrar la decisión final en unos días”, dijo Johansson en una rueda de prensa en Bruselas tras la reunión junto al ministro español del Interior, Fernando Grande-Marlaska Gómez.
El ministro de España, que actualmente ocupa la presidencia rotatoria del Consejo de la UE, dijo que “se pueden afinar los puntos de detalle”, y se hizo eco de que “esperamos finalizar el enfoque general en los próximos días”.
Un avance en esta cuestión allanaría el camino para un acuerdo sobre la reforma de la política de asilo de la UE antes de las elecciones europeas de junio, después de casi 10 años de intentos fallidos de reforma.
“Italia no dijo que no… sólo pidió tiempo”, dijo el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, en una conferencia de prensa en Berlín junto a su homóloga alemana, Annalena Baerbock. Tajani añadió que se necesita más tiempo “para examinar el contenido de esta propuesta desde un punto de vista jurídico”.
Aunque no había ninguna votación en el orden del día, los ministros en su reunión del jueves se propusieron llegar a un acuerdo político.
Horas antes, el gobierno de centroizquierda de Alemania retiró su veto sobre el acuerdo, facilitando un acuerdo sobre la regulación de crisis que detalla cómo los países fronterizos de la UE manejan a las personas que buscan asilo durante los picos de migración. Los Verdes, que pertenecen a la coalición gobernante alemana, inicialmente exigieron la exención de los menores de los controles fronterizos y se opusieron a los intentos de diluir los derechos de los inmigrantes en tiempos de crisis.
“Hoy asumiremos este compromiso”, dijo la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, a sus colegas ministros del Interior de la UE durante una sesión pública en Bruselas por la mañana.
La retirada de Alemania de su veto significa que, técnicamente, el acuerdo debería tener suficientes votos para ser aprobado. Pero tres diplomáticos, a los que se concedió el anonimato para poder hablar libremente, dijeron que sin Roma a bordo, cualquier acuerdo es políticamente imposible. Italia ha experimentado recientemente nuevos picos de llegadas de inmigrantes desde el norte de África a través del mar Mediterráneo.
En una serie de concesiones de último minuto destinadas a apaciguar a los Verdes alemanes, la presidencia española del Consejo propuso un texto que ofrecía mayores garantías de derechos humanos para los inmigrantes. Pero Italia tenía dudas sobre el nuevo lenguaje, dijeron otros dos diplomáticos.
En particular, Italia se opuso a una redacción más suave sobre las misiones de rescate de migrantes que se agregó al borrador más reciente del acuerdo, visto por POLITICO, según los mismos dos diplomáticos.
Estas organizaciones no gubernamentales son una espina clavada para el gobierno de derecha de Italia, que está en desacuerdo con Berlín por la financiación por parte del gobierno alemán de misiones de rescate humanitario frente a las costas italianas.
Los ministros de la UE enfrentan una presión cada vez mayor para aprobar un acuerdo en medio de crecientes llegadas de inmigrantes a Italia y antes de las elecciones europeas del próximo año. La semana pasada, el Parlamento Europeo bloqueó las conversaciones sobre temas clave del pacto migratorio de la UE, incluida la regulación de la crisis, en un intento de obligar a los países miembros a aprobarlo lo antes posible.
Hans Von der Burchard contribuyó con este reportaje desde Berlín.
