Durante una entrevista con RAC1 a finales de septiembre, el excomisario de la Policía Nacional, José Manuel Villarejo, afirmó que el presidente de Barcelona, Joan Laporta, dio pruebas a la policía que llevaron al encarcelamiento de su predecesor Sandro Rosell.
En 2017, Rosell fue encarcelado sin derecho a fianza tras ser acusado de blanqueo de dinero en relación con los derechos televisivos anteriores de partidos de la selección brasileña. Estaría tras las rejas durante 645 días, antes de ser absuelto en 2019.
Laporta emprendió acciones legales contra Villarejo tras estas declaraciones, y el caso al respecto está actualmente en curso. Sin embargo, parece estar llegando a su fin, tal y como EFE (vía Maryland) han afirmado que Villarejo ha negado cualquier insinuación de que Laporta aportase pruebas que condujeron al encarcelamiento de Rosell.
Villarejo no sólo ha estado en el lado equivocado de Barcelona en las últimas semanas. El Real Madrid también prepara acciones judiciales contra él después de que afirmara que sobornaron a árbitros antes de los hechos del caso Negreira, cuyo proceso judicial aún está abierto.