Casi dos días después, el paradero de Petrov, el adolescente de 15 años que desapareció el viernes en aguas del Mar Menor, sigue siendo una incógnita. Los efectivos de Emergencias, desplegados por tierra, mar y aire, reanudaron este domingo por la mañana la búsqueda del menor que naufragó cuando iba con dos amigos en una canoa.
El equipo está compuesto por personales por una embarcación del Servicio de Emergencias y Protección Civil del Ayuntamiento de Los Alcázares y un helicóptero de la Dirección General de Seguridad y Emergencias con bomberos del CEIS. También colabora la Cofradía de Pescadores y, por tierra, personal de la Academia General del Aire.
Además, se mantiene el radioaviso a las embarcaciones que naveguen por la zona y a la cofradía de pescadores por si se produce alguna novedad en el caso.
Precisamente en la tarde de este sábado el aviso de un vecino, que creía haber atisbado un cuerpo flotando en la playa, activó nuevamente a los equipos de emergencias. La alerta se produjo en la zona de Los Alcázares, a unos 300 metros de la playa de La Encarnación. Tras acercarse a esa zona de costa los equipos de Emergencias comprobaron que los restos que inicialmente habían sido confundidos con un cuerpo eran unas ramas flotantes arrastradas por el viento.
Los familiares y allegados del joven siguen aguardando alguna pista que ayude a localizar al menor. El rastro del menor de edad, vecino de Los Alcázares, se perdió cuando la piragua en la que navegaba con otros dos amigos naufragó. Sus compañeros, de 16 y 22 años, fueron rescatados por la Policía Local con síntomas de hipotermia y fuerte agotamiento. Según fuentes municipales, los jóvenes explicaron a los agentes que llevaban cerca de dos horas nadando para tratar de alcanzar la costa. El Centro de Coordinación de Emergencias ha puesto a disposición de la familia asistencia psicológica que, por el momento, ha rechazado.