El Ministerio de Defensa de Taiwán condenó el sábado a Beijing por enviar globos a través de la línea media que separa la isla autónoma de China, diciendo que representan una “seria amenaza” para las rutas de aviación y son una forma de acoso.
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China reclama a Taiwán como parte de su territorio y en los últimos años ha intensificado la presión militar y política, enviando una cantidad sin precedentes de aviones de combate y buques de guerra alrededor de la isla.
En diciembre, el Ministerio de Defensa de Taipei comenzó a informar sobre la aparición de globos chinos alrededor de Taiwán, observando al menos cuatro incidentes en los que volaron directamente sobre la isla.
“Basándose en su reciente trayectoria de deriva, (los globos) han planteado una seria amenaza a la seguridad de muchas rutas de aviación internacionales”, dijo el Ministerio de Defensa Nacional en un comunicado condenando el “desprecio por la seguridad de la aviación” de China.
El ministerio también publicó el sábado una ilustración que muestra dos globos chinos que, según dijo, habían cruzado la línea mediana un día antes, uno de ellos directamente sobre la isla.
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“(El) objetivo principal de la reciente detección de globos es el acoso en la ‘zona gris’ en un intento de utilizar la guerra cognitiva para afectar la moral de nuestro pueblo”, añadió.
Las tácticas de “zona gris” se refieren a acciones agresivas desplegadas por un Estado que no llegan a una guerra abierta, que según muchos expertos es lo que China le está haciendo a Taiwán con su demostración casi diaria de fuerza militar alrededor de la isla.
“Pedimos el fin inmediato de esta práctica para garantizar la seguridad de los vuelos en la región”, dijo el ministerio.
La declaración se produce una semana antes de las elecciones presidenciales de Taiwán, que determinarán el futuro de las relaciones de la isla con Beijing dependiendo de quién elijan los votantes.
Desde la elección de la presidenta taiwanesa Tsai Ing-wen en 2016, China ha cortado todas las comunicaciones de alto nivel con su gobierno porque no reconoce la soberanía de Beijing sobre la isla.
(AFP)
