Debido a la presencia de pellets de plástico en las costas de Galicia, Asturias, y pronto en las de Cantabria y País Vasco, el tema de los microplásticos es un debate que ha vuelto a salir a la luz. En este caso, es noticia debido a una nueva técnica que permite descubrir que las botellas de plástico contienen miles de nanopartículas capaces de infiltrarse en las células, fragmento más pequeños que los microplásticos con efectos desconocidos sobre la salud.
Naixin Quian, coautor del estudio desarrollado por investigadores de la Universidad de Columbia y publicado en la revista PNAS, explica que el análisis pasó por estudiar si había nanoplásticos en el agua embotellada, de qué tipo y en qué cantidades utilizando para ello una técnica llamada microscopía de dispersión estimulada Raman. Con ella detectaron que, de media, en cada litro se podía encontrar en torno a 250.000 de estos trocitos de plásticos más pequeños que los microplásticos.
“Se habían desarrollado métodos para ver nanopartículas, pero no se sabía qué se estaba mirando“, explica Naixin Quian, asegurando que su estudio es importantísimo porque abre la puerta al estudio de estas nanopartículas y sus posibles efectos en nuestra salud.
Gracias al nuevo método se han podido observar las cantidades de nanopartículas de siete plásticos ordinarios y contarlas individualmente; esa selección únicamente representa el 10% de las partículas halladas. Al ser trozos tan diminutos, se desconoce su composición.