Ecuador se encuentra inmerso en un repunte de violencia e inseguridad que ha llevado al presidente Daniel Noboa a decretar el estado de excepción y el toque de queda. Además, se han producido incidentes en centros penitenciarios y fugas de presos.
La manifestación última de esta situación ha sido la irrupción de hombres armados en un canal de televisión local. El incidente se ha iniciado pasadas las 14.00 (hora local), cuando miembros de grupos delictivos han irrumpido en las instalaciones y han abierto fuego dentro del estudio mientras la señal de TC Televisión estaba en el aire. Finalmente, la policía ecuatoriana ha conseguido reducir a los violentos y ha evacuado las instalaciones.
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha declarado la guerra al crimen organizado tras los últimos incidentes. E, incluso, la Asamblea de Ecuador ha ofrecido amnistía a policías y militares que hagan uso de la fuerza durante el conflicto armado: “Respaldamos a las Fuerzas Armadas, Policía Nacional y a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley”.
En este contexto, ‘El Cascabel’ ha podido contactar con residentes de Ecuador que muestran su preocupación con la situación que se está viviendo. Uno de esos residentes es Javier Portomeñe, un español que vive en Ecuador desde hace dos años y que expresa el miedo que está sintiendo la ciudadanía ante este repunte de inseguridad: “En Ecuador el problema es que los grupos de narcotráfico se han infiltrado hasta los más altos niveles, llegando a tener un gran poder en algunas zonas”. Javier nos explica que va a ser complicado acabar con el crimen y que el Estado consiga ganar la guerra porque el narcotráfico “está metido en el Estado” y aúna un gran poder en las altas instancias del país. “Ahora mismo es un cara o cruz, si el Estado consigue ganar esta batalla es posible que logren atajar el problema y si no se cronificará el problema”explica Javier a Antonio Jiménez.