Una ex subdirectora de las Escuelas Públicas de Chicago compareció ante un juez el martes por primera vez desde que el informe de un inspector general destacó las acusaciones de que robó más de un cuarto de millón de dólares de una escuela primaria.
El informe anual de la Oficina del Inspector General señaló múltiples casos de despilfarro y abuso en las Escuelas Públicas de Chicago, revelando pérdidas financieras en el distrito con pocos recursos. El informe también insta a CPS a adoptar nuevos protocolos de capacitación para voluntarios y proveedores como parte de sus esfuerzos continuos para abordar la conducta sexual inapropiada entre adultos y estudiantes.
El informe hizo acusaciones públicas de que Tracey Canty-Robinson, de 55 años, malversó 274.000 dólares en pagos de programas extracurriculares.
Ella no fue nombrada en el documento, pero los registros muestran que Canty-Robinson fue nombrada en una acusación de 17 cargos por robo en la escuela primaria Skinner West en el Near West Side.
“¿Cómo es posible que alguien pueda tomar más de 200.000 dólares de un programa extraescolar en la escuela y nadie en la escuela se dé cuenta de que se ha acabado el dinero? Y además, ¿cómo es posible que se pueda robar tanto dinero y que el programa pueda funcionar sin cesar?” dijo el inspector general Will Fletcher al Tribune la semana pasada.
Canty-Robinson compareció ante el juez Stanley Sacks el martes por la mañana en el edificio del Tribunal Penal de Leighton con su abogado, quien le dijo al juez que el descubrimiento de pruebas en el caso asciende a “miles de páginas”.
La acusación formal alega que ella alteró cheques durante un período de varios años. Un informe de la Procuraduría General precisó que está acusada de malversar $274,000 en pagos de programas extraescolares.
Canty-Robinson enfrenta cargos, que incluyen robo en una escuela o lugar de culto, falsificación y continuación de una empresa de delitos financieros. Tres de los cargos son delitos graves de clase X.
Se declaró inocente y fue puesta en libertad bajo fianza de reconocimiento personal en julio.
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En un comunicado, su abogado, Andre Grant, dijo que ella tiene “derecho a la presunción de inocencia”.
La oficina del inspector general remitió el caso de Canty-Robinson a las autoridades después de hacer referencia a las acusaciones en un informe anual de 2021.
Canty-Robinson renunció el 12 de marzo de 2020, luego de que la OIG solicitara entrevistarla sobre su investigación, según CPS. Luego fue incluida en una lista de “no contratar” en julio de 2021, cuando CPS recibió el informe de la OIG.
Las acusaciones contra Canty-Robinson se encontraban entre una serie de preocupaciones financieras planteadas en el informe del inspector general, incluidos miles de dispositivos tecnológicos perdidos y robados que el distrito informó al Departamento de Policía de Chicago.
Pero el informe señaló que el distrito no aprovechó los servicios (por los cuales CPS ya había pagado $2.6 millones) capaces de congelar, rastrear geográficamente y potencialmente recuperar los dispositivos.
En otro caso, la OIG descubrió que un empleado de la escuela robó 150.000 dólares mediante una combinación de desvío del efectivo recaudado en la escuela y solicitudes falsas de pago extra.
Alysa Guffey del Chicago Tribune contribuyó.