La larga y prolongada caída en desgracia de la ex estrella del tenis española Arantxa Sánchez Vicario continuó el miércoles, después de que un tribunal de Barcelona la condenara a dos años de prisión por ocultar bienes.
Su exmarido, Josep Santacana, fue condenado a tres años y tres meses por el mismo delito, mientras que los demás acusados en el caso fueron condenados a penas de un año y tres meses, según informa la agencia española.
Además, Sánchez, de 52 años, y Santacana han sido condenados a pagar más de 6,6 millones de euros en concepto de indemnización al banco privado Banque de Luxemburgo.
Sánchez no verá, sin embargo, el interior de una celda de prisión, por orden expresa del juez en el fallo de sentencia. Las penas de prisión de dos años o menos suelen estar suspendidas para todos los que delinquen por primera vez en España.
El tribunal declaró culpables a la ex pareja de ocultar bienes para evitar la devolución de un préstamo de 6 millones de euros del Banco de Luxemburgo que habían suscrito para pagar una multa ante la Agencia Tributaria española de 5,2 millones de euros. La pareja había incurrido en la multa por defraudar sus impuestos.
Sánchez había admitido los delitos durante el juicio, según el diario español El Pais, y achacó a Santacana el ocultamiento de los bienes. Actualmente, la pareja está inmersa en una larga batalla judicial en los Estados Unidos.
Santacana, por su parte, se declaró inocente y culpó del fraude a la familia del ex tenista.
La sentencia es recurrible, por lo que es muy poco probable que Santacana comience a cumplir su pena de cárcel hasta que se hayan agotado estos procesos legales.
Sánchez, que vive en Miami con sus dos hijos, tuvo problemas por primera vez con el fisco español allá por los años 1990, cuando los tribunales dictaminaron que no vivía en el principado de Andorra, como ella afirmaba, sino en España.
En 2009, tras una batalla judicial de 14 años, se le ordenó pagar 3,5 millones de euros por los impuestos que evadió entre 1989 y 1993.
En el ámbito deportivo, fue número uno del mundo en individuales y dobles y ganó 14 Grand Slams y cuatro medallas olímpicas.
En una entrevista con El Paisafirmó que ahora vive de dar clases privadas de tenis en Miami y que la mitad de todo lo que gana se destina a pagar su deuda con el Banque de Luxemburgo.
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