El presidente francés, Emmanuel Macron, y su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, mostraron el jueves su unidad en importantes cuestiones globales, al tiempo que eludieron las diferencias sobre la guerra en Ucrania.
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Macron concluyó su gira de tres días por el gigante latinoamericano con un viaje solemne pero cálido al palacio presidencial en la capital modernista Brasilia.
El líder francés rindió homenaje al “espíritu de resistencia” del gobierno de Lula para “restaurar la democracia” después de que una multitud de partidarios de extrema derecha del expresidente Jair Bolsonaro irrumpiera en los asientos de poder de la ciudad en enero de 2023.
Lula elogió la relación entre los dos países como una que crea “un puente entre el Sur global y el mundo desarrollado”.
Si bien los dos hombres restablecen firmemente los gélidos lazos de los años de Bolsonaro, mantienen profundas diferencias sobre la guerra en Ucrania, un tema que sólo brevemente asomó la cabeza.
Si bien Francia y Occidente apoyan incondicionalmente a Kiev, Lula ha dicho en el pasado que Ucrania y Rusia comparten la responsabilidad por el conflicto y se ha negado a aislar a Moscú.
¿Putin en la reunión del G20?
En respuesta a una pregunta de un periodista, Macron dijo que Brasil, como actual presidente del G20, podría invitar al presidente ruso Vladimir Putin a una cumbre en Río de Janeiro en noviembre si otros miembros estaban de acuerdo.
“El significado de este club es que debe haber consenso con los otros 19. Ése será un trabajo de la diplomacia brasileña”, afirmó.
Si una reunión de este tipo puede ser “útil, debe realizarse”, afirmó Macron.
Lula respondió sólo que la “diversidad” debe ser aceptada en organizaciones como el G20.
Putin se perdió la cumbre del G20 del año pasado en la capital india, Nueva Delhi, evitando un posible oprobio político y cualquier riesgo de detención criminal bajo una orden de la Corte Penal Internacional (CPI).
En septiembre de 2023, Lula dijo que “no había manera” de que Putin fuera arrestado si asistía a la cumbre de Río de Janeiro.
Poco después, dio marcha atrás y dijo que correspondería a la justicia decidir sobre el eventual arresto de Putin y no a su gobierno.
Los únicos comentarios de Lula sobre el conflicto fueron que “los dos líderes testarudos” tendrán que “llegarse bien”, refiriéndose a Putin y al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky.
Unidad sobre Venezuela
Sin embargo, destacó que Ucrania no era la prioridad de Brasil y recurrió a una crisis en su propio vecindario, en la que él y Macron coincidieron: Venezuela.
Ambos dirigentes condenaron la exclusión de la candidata elegida por la principal coalición opositora, Corina Yoris, de 80 años, de las elecciones del 28 de julio.
“Condenamos muy firmemente la exclusión de un candidato serio y creíble de este proceso”, dijo Macron.
Lula calificó la situación de “grave” y afirmó que no había “ninguna explicación jurídica o política para prohibir a un opositor ser candidato”.
“Le dije a Maduro que lo más importante para restablecer la normalidad en Venezuela era evitar cualquier problema en el proceso electoral, que las elecciones se realizaran de la manera más democrática posible”.
Desde la protección del Amazonas hasta la cooperación en la construcción de submarinos y los vínculos económicos, los dos líderes mostraron la amplia asociación franco-brasileña durante su visita de tres días.
Macron y Lula también ignoraron las tensiones sobre el largamente postergado acuerdo de libre comercio UE-Mercosur, que Brasil ha impulsado y Francia ha bloqueado.
Macron criticó el acuerdo calificándolo de “un acuerdo realmente malo” y dijo que debería ser enterrado en favor de uno nuevo que “sea responsable desde el punto de vista del desarrollo, el clima y la biodiversidad”.
Lula dijo estar “muy tranquilo” y se limitó a señalar que Brasil “no negocia con Francia” sino con la UE.
La estrecha relación de los dos líderes quedó resaltada por una cálida reunión en el Amazonas, en la que fueron fotografiados sonriendo y tomados de la mano, para el deleite de los brasileños que generaron una serie de memes comparando las imágenes con un álbum de bodas.
(AFP)