Tras la protesta de los fanáticos, los Gigantes de San Francisco rápidamente revirtieron el sábado su plan de reemplazar los ladrillos conmemorativos originalmente colocados junto a la estatua de Willie McCovey más allá del jardín derecho con un quiosco digital que habría mostrado los mensajes originalmente inscritos en los ladrillos.
Shana Daum, vicepresidenta de comunicaciones, dijo en un mensaje de texto que la organización “explorará múltiples opciones que funcionarán en el nuevo parque para mostrar los mensajes de los mosaicos”, pero que no tomarán la forma del quiosco digital, que fanáticos molestos que pagaron por una conmemoración física.
El nuevo China Basin Park, que se inaugurará a tiempo para el partido inaugural en casa de los Gigantes el viernes, conectado al desarrollo de Mission Rock, contará con una estatua de McCovey reinstalada, pero no los ladrillos que la acompañaron hasta que comenzó la construcción en 2020. Los ladrillos originales fueron destruidos, Daum dijo, pero sus mensajes fueron preservados.
El plan original, anunciado en un correo electrónico el jueves a los fanáticos que originalmente compraron los ladrillos, era transferir los mensajes a un quiosco digital que se exhibiría en el parque. Sin embargo, la organización recibió una rápida reacción de los fanáticos que pagaron entre $95 y $250 en 2002 para financiar mejoras en el estadio.
A las pocas horas de que el San Francisco Chronicle informara sobre la consternación de los fanáticos, la organización cambió de rumbo.
“Escuchamos a nuestros fanáticos apasionados y leales”, dijo Daum.