La nueva financiación de Orbex puede acelerar la puesta en órbita de su microlanzador Prime

Desarrollador de lanzamientos pequeños con sede en el Reino Unido Orbex recibió otro impulso del banco nacional de Escocia y otros inversores mientras se prepara para su primer lanzamiento orbital, aunque esa misión aún no tiene una fecha fijada.

Fundada en 2015, Orbex es una de las pocas empresas que compiten por desarrollar la próxima generación de vehículos de lanzamiento europeos. Estas empresas buscan llenar el enorme vacío dejado por el retiro del Ariane 5 y los importantes retrasos en los cohetes Ariane 6 y Vega C; la ausencia de estos vehículos significa que la capacidad de lanzamiento nativa proveniente de Europa es esencialmente nula.

Pero la ausencia también significa una oportunidad para Orbex. La compañía está desarrollando lo que a veces se llama un microlanzador: un vehículo de dos etapas llamado Prime que mide sólo 19 metros de altura y está diseñado para transportar cargas útiles de hasta 180 kilogramos. La comparación más cercana es el Electron de Rocket Lab, que es un metro más corto pero puede transportar hasta 300 kilogramos.

Para Orbex, esta pequeña estatura es un beneficio, no un inconveniente, y el director ejecutivo de Orbex, Philip Chambers, dijo a TechCrunch por correo electrónico que la empresa está viendo “condiciones de mercado positivas” para su producto.

“Estamos viendo un crecimiento exponencial del lanzamiento de satélites en LEO y la demanda de lanzamiento supera con creces la oferta; en este momento no es posible lanzar ni un solo kilogramo desde Europa y hay una demanda reprimida de capacidades de lanzamiento soberanas”, afirmó. dicho. “Ofreceremos libertad de acción a los clientes europeos para que tengan el control de sus propios lanzamientos y lancen cargas útiles europeas desde suelo europeo”.

Prime se lanzará desde un nuevo puerto espacial en Sutherland, al norte de Escocia, que se está construyendo con la ayuda de financiación de la agencia espacial nacional del Reino Unido. El objetivo es incorporar finalmente una tecnología de recuperación patentada que la empresa denomina REFLIGHT. Esta es una estructura entre etapas que se encuentra entre las etapas del cohete; Después de que el propulsor se desprenda, cuatro ‘pétalos’ se desplegarán y, junto con un paracaídas, crearán suficiente resistencia para permitir un suave amerizaje en el océano.

Eventualmente también podría estar en los planes un vehículo más grande, aunque Chambers tenía claro que Prime era la primera prioridad de la compañía. Sin embargo, dijo que muchas de las tecnologías centrales de ese cohete podrían escalarse para soportar cargas útiles más grandes.

“Las leyes de la física dictan que si quieres competir en costo por kg debes hacerlo con vehículos más grandes, por lo tanto, creo que tiene sentido que Orbex considere esto”.

La compañía está iniciando su Serie D con £16,7 millones ($20,7 millones) en nueva financiación, con contribuciones adicionales de Octopus Ventures, BGF, Heartcore, EIFO y otros. El nuevo capital se produce después de que Orbex cerrara una inversión de 40,4 millones de libras (50 millones de dólares) Serie C en octubre de 2022. Si bien un portavoz confirmó que la nueva financiación “ayudará Orbex acelerar el desarrollo de Prime… para garantizar la plena preparación y escalabilidad para su período de lanzamiento”, aún no se ha anunciado una ventana de lanzamiento firme.

Fuente