El cambio de sistema del Atlético de Madrid da sus frutos en el tramo final de la temporada

El Atlético de Madrid finalmente parece un poco más seguro en defensa, después de largos tramos de la temporada inestables y poco confiables. No ha pasado desapercibido que aquello por lo que se hicieron famosos los equipos de Diego Simeone era lo que les causaba más problemas que cualquier otra cosa.

Como lo destaca Diario AS, la victoria del sábado sobre el Real Mallorca fue su primer partido con la portería a cero en 13 partidos, tres meses después de su anterior blanqueada. Sin mencionar el hecho de que es apenas su segunda victoria fuera de casa en 2024.

Ese cambio se ha atribuido al retoque realizado por Simeone, pasando de un 5-3-2 con Antoine Griezmann acompañado de un nueve, normalmente Álvaro Morata, a un 5-4-1 con Griezmann como delantero en muchas ocasiones. La idea es que los dos jugadores centrales detrás de Griezmann, en las últimas dos semanas Marcos Llorente y Ángel Correa, uno de ellos ataque el espacio detrás de la defensa, otro se quede corto y Griezmann tenga espacio para moverse.

En defensa, la seguridad adicional proporcionada por otro centrocampista también ayudó, y el Atlético lució mucho mejor contra el Mallorca. Simeone hizo el cambio después de una frustrante derrota ante el Alavés fuera de casa, y si no hubiera sido por un balón errante de Griezmann contra el Athletic Club, bien podrían estar saboreando una segunda portería a cero consecutiva.

Queda por ver si se tratará de una alteración permanente o de un cambio temporal. Con Álvaro Morata fuera de forma, tras un solo gol en 18 apariciones, y Memphis Depay lesionado, es comprensible que Simeone haya decidido alejarse de un sistema que se basa principalmente en un nueve. También existe incertidumbre sobre la línea delantera del Atlético de cara al verano, y es posible que también se esté adaptando sobre la marcha en julio.



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