Abril ha afianzado la recuperación laboral de Granada. La provincia ha creado empleo por tercer mes consecutivo, alcanzando una cifra récord de 364.134 afiliados. En cuanto al paro, Granada ha bajado de la barrera de los 75.000 parado por primera vez desde abril de 2008.
El número total de parados se sitúa en 74.533, 2.108 menos que en marzo. Esta caída del 2,75% del desempleo es ligeramente inferior a la registrada en Andalucía (-3%) pero mejora el comportamiento nacional (-2,22% de paro).
El desempleo se reduce en todos los sectores, aunque la caída ha sido especialmente significativa en Servicios (49.821 parados, 1.470 menos); el colectivo sin empleo anterior (8.282 parados, 388 menos que en marzo); y la construcción (7.198 desempleados, lo que deja un descenso de 120 parados). También se reduce el paro en agricultura (-78, hasta los 5.263) e industria (-52, hasta los 3.609).
En cuanto a la afiliación, Granada ha alcanzado por primera vez los 364.134 ocupados tras sumar 2.368 trabajadores en activo en el último mes (+0,65%). Sin embargo, estos positivos datos de afiliación dejan dos noticias negativas: el crecimiento del empleo se modera respecto al mes de marzo, cuando la afiliación creció un 0,82%; y el ritmo de recuperación laboral es menor que el de Andalucía (+1,22%) y el de España (+0,95%).
La hostelería es el sector que más empleo crea en abril, sumando por sí sola 426 afiliados. También es destacable la evolución del empleo privado en los sectores de la construcción (+277 afiliados) y la agricultura (+123 afiliados), beneficiado sin duda por las últimas lluvias, que han salvado campañas como las del espárrago. El comercio, sin embargo, ha registrado una caída de la afiliación de 140 trabajadores.
Valuación
La secretaria general de la Confederación Granadina de Empresarios (CGE), María Vera, ha destacado la “resistencia” de las empresas granadinas y su compromiso con el empleo, impulsado por el inicio de la temporada alta turística y la mejora de la situación del campo. “Los datos demuestran que, pese a que las condiciones sigan sin ser las idóneas, las empresas responden y tienen entre sus prioridades mantener y proteger sus plantillas”.
Con todo, Vera ha querido recordar que el crecimiento del empleo no está siendo paralelo al de la actividad empresarial, que sigue condicionada por la inestabilidad, los costes laborales y las cargas impositivas. “La productividad y la rentabilidad siguen debilitándose. Las pymes cerraron 2023 con una caída del 0,7% de la productividad, agravada por las crecientes dificultades financieras”, ha apuntado la secretaria general de la Confederación.
“Las cifras de récord del empleo, que por supuesto son muy positivas, no pueden hacernos olvidar que tanto nuestro mercado de trabajo como nuestro tejido empresarial padecen todavía algunas debilidades que solo podrán corregirse con medidas que favorezcan la recuperación de la productividad, que garanticen la seguridad jurídica y favorezcan la inversión y el crecimiento”.