Por Karen Matthews | Associated Press
NUEVA YORK – Una enfermera fue despedida de un hospital de la ciudad de Nueva York después de que se refiriera a la guerra de Israel en Gaza como un “genocidio” durante un discurso al aceptar un premio.
La enfermera de partos Hesen Jabr, que es palestina estadounidense, fue honrada por NYU Langone Health por su compasión en el cuidado de madres que habían perdido bebés cuando estableció un vínculo entre su trabajo y el sufrimiento de las madres en Gaza.
“Me duele ver a las mujeres de mi país sufriendo pérdidas inimaginables durante el actual genocidio en Gaza”, dijo Jabr, según un vídeo del discurso del 7 de mayo que publicó en las redes sociales. “Este premio es profundamente personal para mí por esas razones”.
Jabr escribió en Instagram que llegó al trabajo el 22 de mayo para su primer turno de regreso después de recibir el premio cuando fue convocada a una reunión con el presidente y el vicepresidente de enfermería del hospital “para discutir cómo ‘pongo a otros en riesgo’ y ‘ arruinó la ceremonia’ y ‘ofendió a la gente’ porque una pequeña parte de mi discurso fue un homenaje a las madres afligidas de mi país”.
Ella escribió que después de trabajar la mayor parte de su turno la “arrastraron una vez más a una oficina” donde le leyeron su carta de despido y luego la escoltaron fuera del edificio.
Un portavoz de NYU Langone, Steve Ritea, confirmó que Jabr fue despedida después de su discurso y dijo que “también hubo un incidente previo”.
“En diciembre, después de un incidente anterior, se advirtió a Hesen Jabr que no llevara sus puntos de vista sobre este tema divisivo y polémico al lugar de trabajo”, dijo Ritea en un comunicado. “En cambio, optó por no prestar atención a eso en un reciente evento de reconocimiento a los empleados al que asistieron muchos de sus colegas, algunos de los cuales estaban molestos por sus comentarios. Como resultado, Jabr ya no es empleado de NYU Langone”.
Ritea no proporcionó ningún detalle del incidente anterior.
Jabr defendió su discurso en una entrevista con The New York Times y dijo que hablar de la guerra “era muy relevante” dada la naturaleza del premio que había ganado.
“Fue un premio por el duelo; era para madres en duelo”, dijo.
El Ministerio de Salud de Gaza dice que más de 36.000 personas han muerto en el territorio durante la guerra que comenzó con el ataque de Hamas el 7 de octubre contra Israel. Alrededor del 80% de la población de Gaza, de 2,3 millones de habitantes, ha sido desplazada y funcionarios de la ONU dicen que partes del territorio están experimentando hambruna.
Los críticos dicen que la campaña militar de Israel equivale a genocidio, y el gobierno de Sudáfrica acusó formalmente al país de genocidio en enero cuando pidió al tribunal superior de las Naciones Unidas que ordenara el cese de las operaciones militares israelíes en Gaza.
Israel ha negado la acusación de genocidio y ha dicho a la Corte Internacional de Justicia que está haciendo todo lo posible para proteger a la población civil de Gaza.
Jabr no es el primer empleado del hospital, que pasó a llamarse NYU Medical Center después de una importante donación del multimillonario y donante del Partido Republicano Kenneth Langone, que es despedido por comentarios sobre el conflicto de Medio Oriente.
Un destacado investigador que dirigía el centro oncológico del hospital fue despedido después de publicar caricaturas políticas contra Hamás, incluidas caricaturas de pueblos árabes. Desde entonces, ese investigador, el biólogo Benjamin Neel, ha presentado una demanda contra el hospital.
El despido de Jabr tampoco fue la primera vez que estuvo en el centro de atención. Cuando tenía 11 años en Luisiana, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles presentó una demanda en su nombre después de que la obligaran a aceptar una Biblia del director de su escuela pública.
“Este no es mi primer rodeo”, dijo al Times.