Las empresas han empezado a moderar sus incrementos salariales tras dos años de alzas prácticamente ininterrumpidas. No es que los sueldos estén bajando, ni mucho menos, en tanto que la hora trabajada se paga hoy un 4,2% más, de media, que hace un año. Pero esa senda en la que los aumentos eran cada vez mayores y en la que hasta ahora estaba instalado el mercado laboral español empieza decaer.
Los datos publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística(INE), referentes al índice de costes laborales del primer trimestre del año, constatan que este indicador acumula dos trimestres consecutivos a la baja. El 4,2% del primer trimestre era un 4,5% en el último trimestre del 2023 y un 5% en el segundo, según el cómputo desestacionalizado.
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Los incrementos salariales que ofrecen las compañías cada vez son menores, mientras la inflación se resiste a remitir. A mediados del año pasado los precios interrumpieron su tendencia a la baja y le dieron la vuelta al calcetín, situándose desde entonces en una horquilla de entre el 2,8% y el 3,6%, esta última cifra es la registrada en mayo.
El sueldo por hora trabajada que pagan las empresas todavía está subiendo a una mayor intensidad que el IPC, algo inédito en los primeros compases de la crisis de precios. Si bien las distancias se van recortando.
[–>No todos los indicadores apuntan en la misma dirección. Este mismo lunes está previsto que el Ministerio de Trabajo actualice los datos de salarios pactados a través de convenio colectivo. En lo que va de año este indicador ha venido registrando aumentos salariales sustancialmente inferiores a los del INE y por debajo del IPC. Según los datos de abril, los salarios pactados están creciendo a un ritmo del 2,9%.
En esa misma línea apuntan los datos de CaixaBank Research, que monitorizan mensualmente las nóminas de sus clientes para estudiar cómo evolucionan los salarios. Según sus registros, los sueldos están creciendo a un 2,7%, a fecha de mayo, y la tendencia es a la desaceleración, respecto al 4,4% registrado en junio del año pasado.
Los sectores con mejores empleos, los que más suben sueldos
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Volviendo al índice de costes laborales del INE, los incrementos salariales son transversales, pero no igual de intensos en todos los sectores. Aquellos sectores históricamente asociados a mejores condiciones de trabajo son los que, a la vez, están subiendo más los sueldos a su gente. Las empresas dedicadas a la información y las comunicaciones o a las actividades científicas y técnicas, dos campos que el Gobierno siempre pone como ejemplo de empleos de alto valor añadido, están subiendo nóminas a un ritmo del 7,9% y 6,1%, respectivamente.
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Otro sector que destaca positivamente, pero con una trayectoria distinta, es la hostelería. Este gremio, que es el que peor paga en términos absolutos, acumula varios trimestres entre las actividades que más están incrementando sus salarios. Las empresas del sector responden así a, por un lado, un aumento sostenido de la facturación y el negocio desde el fin de las restricciones del covid, y, por el otro, ha una falta también sostenida desde entonces de mano de obra. En los dos últimos años la restauración y compañía ha subido un 11,2% los sueldos, tres puntos por encima de la media en el conjunto de la economía.