Los intentos de negociación no fueron suficientes para que el hombre se retirara, y procedió a poner a uno de los rehenes en una llave de cabeza mientras sostenía un cuchillo en su cuello. El francotirador reaccionó rápidamente y realizó un disparo aparentemente imposible en el que la bala atravesó una pantalla de escritorio, entre los dos rehenes, y llegó a la frente del ladrón de bancos. El sospechoso cayó al suelo mientras los rehenes corrían para cubrirse, y el equipo policial arrojó granadas aturdidoras antes de entrar a la habitación.
“Las posiciones de tiro como estas son entrenadas regularmente por francotiradores para incidentes críticos como estos”, dijo el teniente Todd Olmer. de la Oficina del Sheriff del Condado de Lee en un comunicado. “Debido a la exposición limitada del sospechoso, el francotirador realizó un disparo planeado y deliberado a través de un monitor de computadora, alcanzando al sospechoso en el centro de la frente, matándolo instantáneamente”.
Añadió: “Disparar a través de barreras es una habilidad entrenada y practicada rutinariamente por los francotiradores de la unidad de operaciones especiales de la Oficina del Sheriff del condado de Lee. La bala calibre .308 utilizada se selecciona específicamente debido a su conocida confiabilidad balística al viajar a través de barreras intermedias”.