El agua en el río Sena tenía niveles elevados e inseguros de E. coli menos de dos meses antes de que se realicen competencias de natación durante los Juegos Olímpicos de París, según los resultados de las pruebas publicados el viernes.
Los niveles de contaminación en los primeros ocho días de junio, después de fuertes lluvias persistentes en París, mostraron bacterias como E. coli y enterococos más allá de los límites considerados seguros para los atletas.
El informe fue publicado por el grupo de seguimiento Eau de Paris un día después de que un alto ejecutivo del Comité Olímpico Internacional dijera que “no había motivos para dudar” de que las carreras se llevarían a cabo según lo previsto en un tramo del Sena en el centro histórico, cerca de la Torre Eiffel.
Las carreras de maratón de natación de más de 10 kilómetros para mujeres y hombres están programadas para el 8 y 9 de agosto, respectivamente, en aguas que históricamente estaban contaminadas antes de una inversión estadounidense de 1.500 millones de dólares antes de los Juegos Olímpicos.
“Estamos seguros de que nadaremos en el Sena este verano”, dijo el jueves el funcionario del COI Christophe Dubi en una sesión informativa en línea después de escuchar una actualización sobre París de parte de funcionarios de la ciudad y organizadores olímpicos.
A pesar de la confianza expresada públicamente por el COI, la decisión final sobre la aprobación de eventos seguros para los atletas debería recaer en los órganos rectores de los deportes individuales, World Aquatics y World Triathlon.
La seguridad del agua del Sena para los Juegos Olímpicos ha estado en duda desde que se cancelaron algunos eventos de prueba programados en agosto pasado, también después de fuertes lluvias fuera de temporada.
Según las normas europeas, el límite seguro para E. coli es de 900 unidades formadoras de colonias por 100 mililitros. La Federación Mundial de Triatlón utiliza los mismos criterios para determinar la calidad suficiente del agua para las competiciones.
El agua de lluvia se infiltra en el sistema de alcantarillado y, para evitar inundaciones en las calles, el exceso de agua, que transporta bacterias fecales, se desvía al Sena. Para solucionar este problema, en mayo se inauguró un enorme embalse capaz de almacenar 50.000 metros cúbicos de agua durante fuertes lluvias.
La calidad del agua de los ríos en las principales ciudades puede verse afectada por muchos factores, desde la escorrentía hasta el vertido de productos químicos, a veces ilegalmente, y el tráfico de embarcaciones.
A principios de esta semana, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, reforzó su promesa de darse un chapuzón en el río antes del inicio de la competición. El martes confirmó que su natación fue pospuesta hasta después de las elecciones anticipadas en Francia, que finalizarán el 7 de julio.