Dos de los grandes talentos con los que trabajará Flick en el Barça son Pedri y Lamine. De su habilidad para explotar su fútbol, dependerán en gran parte sus opciones de tener éxito. Los dos demostraron ante Croacia que son dos jugadores diferenciales.
De la Fuente está sabiendo crear un ecosistema que impulsa sus mejores cualidades y minimiza algunas de sus limitaciones. Del plan del seleccionador seguro que tomará buena nota Flick, aunque la trayectoria del alemán ya apunta a una dirección parecida.
¿4-3-3…. o 4-2-3-1?
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A pesar de que a España le acompaña la etiqueta de jugar con un 4-3-3, la realidad es que los tres mediocampistas se organizan con un doble pivote formado por Rodri y Fabián y un mediapunta, Pedri, que se mueve con libertad para conectar con los delanteros. La misma fórmula -el 4-2-3-1- por la que apuesta habitualemente Flick en sus equipos.
Con esta posición De la Fuente logra que Pedri tenga la espalda cubierta con el doble pivote y pueda centrarse sobre todo en tareas ofensivas. El plan del seleccionador, con una defensa adelantada, contribuye, además, a que España sea un equipo con las líneas bastante juntas. Una propuesta de riesgo de la que sacó ventaja en algunos momentos Croacia, que encontró a veces espacios entre el doble pivote y los centrales para hacer daño a España.
[–>El gran conector
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En ataque Pedri fue el gran conector con los delanteros. Entre ellos Lamine, que también ha encontrado en Carvajal, con el que comparte banda, un gran aliado. El lateral del Madrid ya avisó que Lamine tenía que ayudarle más en tareas defensivas, pero Carvajal trató de hacer el campo pequeño siendo agresivo, jugando muy alto, más cerca de Lamine de lo que hace Koundé en el Barça.
Lamine ayudó en transiciones defensivas pero no se vio tan exigido como en muchos momentos de la temporada con el Barça, donde el equipo era mucho más largo. A pesar de que le costó entrar en el partido, y de las vigilancias de Gvardiol, terminó dejando su huella. Una de sus grandes apariciones fue una asistencia delicada a Carvajal, que terminó en gol. “Solo tuve que empujarla”, apuntó el lateral tras el partido.
También Morata, uno de los goleadores de la tarde, elogió al azulgrana y bromeó con su futuro. “Siempre les digo a los jóvenes como Lamine acordaros de mí cuando quiera entradas para las finales que vais a jugar”. Nico Williams, uno de los grandes objetivos del Barça, completó el ataque y demostró un gran entendimiento con los delanteros azulgranas. El extremo sufrió más que Lamine con el bloque bajo de Croacia, porque necesita más los espacios para marcar diferencias, pero ayudó al equipo a ser agresivo en ataque.
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Peddri, Lamine y Nico Williams apuntan a ser tres de las grandes bazas ofensivas de España durante todo el torneo. Incluso un fijo como Dani Olmo lo tiene complicado para entrar en el once.