El domingo, el ejército israelí declaró una pausa humanitaria diaria, de 20.00 a 19.00 horas, hora local, en la zona desde el cruce de Karem Abu Salem, también conocido como Kerem Shalom, en el sur de Israel, hasta la carretera Salah al-Din y luego hacia el norte.
El ejército israelí anunció que las pausas tienen como objetivo permitir la entrada de más ayuda a través de una ruta predeterminada hacia el sur. Sin embargo, el ejército dio marcha atrás más tarde, después de verse presionado por el gobierno, diciendo que las operaciones en Rafah, el principal foco de sus operaciones en el sur de Gaza, no se detendrían.
La pausa fue criticada por el gobierno israelí, incluido el primer ministro Benjamín Netanyahu y sus aliados de extrema derecha, el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, y el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir.
La oficina del gobierno de Gaza afirmó que hablar de “pausas tácticas” era “una mentira israelí”.
El lunes por la mañana, las fuerzas israelíes prendieron fuego a la sala de salidas del cruce de Rafah, entre la Franja de Gaza y Egipto, según funcionarios locales e informes de los medios.
Las imágenes compartidas en línea, que no fueron verificadas por Middle East Eye, mostraban lo que parece ser el exterior de la sala de salidas del cruce incinerado.
Los daños al cruce, el único punto de salida no israelí para los palestinos con el mundo exterior, pueden hacerlo inoperable en un futuro próximo, dejando a los 2,2 millones de palestinos de Gaza atrapados en el interior.
La invasión de Rafah y la toma del cruce con Egipto han profundizado una crisis humanitaria ya peligrosa, con rutas de ayuda vitales, a través de los cruces de Rafah y Karem Abu Salem, bloqueadas.
La oficina de medios del gobierno de Gaza ha pedido una apertura urgente de los cruces con Gaza para permitir que la ayuda humanitaria llegue a los palestinos en las partes norte de la franja.
Mientras tanto, los residentes informaron que las tropas israelíes estaban avanzando más hacia las áreas central y occidental de Rafah bajo intenso fuego desde tierra y aire.
El Ministerio de Salud palestino dijo que los soldados israelíes mataron al menos a 10 palestinos e hirieron a decenas más en las últimas 24 horas, incluido el periodista Mahmoud Qasem.
La muerte de Qasem eleva a 151 el número de periodistas y trabajadores de los medios asesinados en Gaza desde el 7 de octubre. Qasem trabajaba para el medio de noticias en línea Falasteen.
Más de 37.300 palestinos han muerto y más de 85.300 han resultado heridos desde el inicio de la guerra en Gaza. Se estima que unas 10.000 personas están desaparecidas, probablemente muertas y enterradas bajo los escombros.
Los funcionarios de salud han dicho que más del 70 por ciento de las víctimas son niños y mujeres.
En Israel, el líder de la oposición Yair Lapid ha declarado que Netanyahu debería disolver el gobierno israelí después de que disolvió el gabinete de guerra el lunes. La medida de Netanyahu se produjo después de que una figura clave de la oposición, Benny Gantz, renunciara al gabinete de seis miembros.
Lapid aplaudió la decisión de Gantz y la calificó de “importante y correcta”.
“Ha llegado el momento de reemplazar este gobierno extremo e imprudente por un gobierno sensato que conduzca al retorno de la seguridad a los ciudadanos de Israel, al regreso de los secuestrados, a la restauración de la economía y el estatus internacional de Israel”, añadió. .
Según Haaretz, Netanyahu enfatizó que seguirá consultando un “foro” limitado para decisiones delicadas.