El Director Ejecutivo Adjunto de UNICEF, Ted Chaiban, hizo estas declaraciones el miércoles durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre los niños y los conflictos armados.
Dijo que los niños palestinos siguen soportando un “sufrimiento incomprensible”, particularmente los de la Franja de Gaza, en medio de una escala “asombrosa” de muerte y destrucción allí.
Chaiban señaló que aún no se han verificado más de 23.000 casos de niños asesinados o mutilados en 2023 debido a la inseguridad, las restricciones de movimiento y los riesgos importantes para el personal humanitario que opera en Gaza.
“Los cuerpos de miles de niños desaparecidos siguen enterrados bajo los escombros, y nada de esto incluye las miles de violaciones denunciadas en lo que va de 2024”, añadió.
El funcionario de UNICEF también destacó los obstáculos que impiden la entrega de ayuda a Gaza y, por lo tanto, aumentan el número de niños con desnutrición aguda, afirmando: “Después de casi nueve meses de horrible conflicto, UNICEF y otros actores humanitarios todavía están luchando para llegar a los necesitados”.
Además, pidió “un alto el fuego completo” en Gaza, donde muchos niños están perdiendo la vida debido a la hambruna impuesta por Israel en el territorio asediado.
Israel desató su brutal ataque contra Gaza el 7 de octubre después de que el grupo de resistencia palestino Hamas llevara a cabo su histórica operación contra la entidad ocupante en represalia por las intensificadas atrocidades del régimen contra el pueblo palestino.
Hasta ahora, el régimen de Tel Aviv ha matado a más de 37.700 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, y ha herido a más de 86.400 personas en Gaza.
En la reunión del Consejo de Seguridad también habló el embajador de Palestina ante la ONU, Riyad Mansour, quien recordó que Israel ha matado a más niños en los últimos meses que en todos los conflictos armados a nivel mundial en los últimos cuatro años.
Estimó que casi 16.000 niños palestinos murieron en la agresión de Israel contra Gaza, mientras que otros 21.000 están desaparecidos.
La Franja de Gaza, que alguna vez fue un lugar vibrante donde los niños establecieron récords mundiales en deportes, ahora ha quedado reducida a un cementerio, continuó Mansour, pidiendo “resolución y responsabilidad colectivas para presionar a Israel para que detenga la locura”.