Los Timberwolves entraron en la agencia libre queriendo volver a firmar a sus propios agentes libres, jugadores como Kyle Anderson, Monte Morris, Jordan McLaughlin y Luka Garza.
Después de volver a contratar a Garza el lunes, los Wolves perdieron a Morris el martes.
Morris acordó un trato con los Suns, según el informante nacional de la NBA Shams Charania.
Los Wolves traspasaron a Troy Brown Jr., Shake Milton y una futura selección de segunda ronda a los Pistons en la fecha límite de traspasos por Morris, de quien esperaban que pudiera ser un anotador y un base desde el banquillo. Pero Morris tuvo una temporada plagada de lesiones y nunca logró despegar su producción. Para los playoffs, Morris estaba fuera de la rotación.
Morris, de 29 años, apareció en 27 partidos para los Wolves y promedió 5,1 puntos por partido. Morris ha estado en siete temporadas de la NBA y ha promediado 10 puntos por partido en su carrera. Promedió 2,3 puntos en nueve partidos de playoffs para los Wolves la temporada pasada. Anteriormente había jugado con el presidente de los Wolves, Tim Connelly, en Denver, donde comenzó su carrera después de ser seleccionado en la segunda ronda del draft de 2017.
Los Wolves todavía tienen al menos dos puestos vacantes en el roster para llenar después de volver a contratar a Garza y reclutar a Rob Dillingham y Terrence Shannon Jr.
La llegada de Dillingham probablemente aceleró la salida de Morris, ya que Dillingham probablemente ganará minutos en el rol de base suplente/anotador suplente que los Wolves habían asignado a Morris.
Anderson y McLaughlin siguen siendo agentes libres, aunque los Wolves esperaban desprenderse de Anderson, que puede ganar demasiado dinero en la agencia libre para un equipo que ya está muy afectado por el impuesto de lujo para la próxima temporada.