Si bien el 4 de julio es el día en que saludamos a la “tierra de los libres y el hogar de los valientes”, cabe señalar que somos una nación libre gracias a los valientes, como los marineros en la base del Mar Rojo.
No sólo mantienen a los estadounidenses libres y seguros para viajar por el mundo, sino que también garantizan que las rutas marítimas estén abiertas para que otras naciones puedan intercambiar pacíficamente bienes y comerciar mediante la libertad de navegación. Es una tarea que la Armada ha estado haciendo desde su fundación el 13 de octubre de 1775, cuando un incipiente Congreso de los Estados Unidos creó la Armada Continental.
Después de una gira prolongada dos veces que duró casi nueve meses, el USS Dwight D. Eisenhower, un portaaviones de propulsión nuclear con 5.000 marineros e infantes de marina, junto con 75 aviones de combate a bordo, se dirige desde su despliegue en el Mar Rojo de regreso a su puerto base de Norfolk, Virginia.
Su lugar en la estación será ocupado por el USS Theodore Roosevelt, con base en San Diego, para contrarrestar los ataques de los rebeldes Houthi de Yemen a los barcos comerciales en la región desde el inicio del conflicto entre Hamas e Israel.
El Roosevelt, también de propulsión nuclear, había estado anclado en aguas surcoreanas frente a Busan para realizar ejercicios militares con Japón y Corea del Sur. Se suma a la “Operación Guardián de la Prosperidad” (a los militares les gustan los nombres floridos para las misiones) para ayudar a proteger el crucial Mar Rojo.
Lo que comparten los dos grupos de trabajo de la Armada son marineros, suboficiales principales y algunos oficiales, quienes han pasado tiempo en la Estación Naval de los Grandes Lagos.
El programa de entrenamiento de reclutas de los Grandes Lagos sigue siendo el único “campo de entrenamiento” de la Armada, y anualmente se gradúan miles de marineros que se dirigen a misiones en la flota o a recibir formación adicional. Se programó una graduación de divisiones de entrenamiento para el 3 de julio en la base naval cercana a la costa del lago Michigan en el norte de Chicago.
Enarbolar los colores rojo, blanco y azul en Oriente Medio es una maniobra peligrosa y estresante porque los marineros estadounidenses están siendo atacados. Interceptaron drones y misiles para protegerse a sí mismos y a los buques mercantes. Los rebeldes hutíes de Yemen afirmaron repetidamente que habían atacado o incluso hundido el Eisenhower, que encabezó la respuesta estadounidense a los ataques mortales contra buques en el mar Rojo y el golfo de Adén, durante su travesía marítima.
Además, el ejército estadounidense ha aumentado las medidas de seguridad en sus bases en toda Europa. Se les ha pedido a los militares que estén más alertas debido a una combinación de amenazas en toda la región, como las elecciones en Francia y el Reino Unido, los Juegos Olímpicos de París y las guerras en Ucrania y Gaza.
Algunos veteranos de la Marina creen que los marineros y los marines del Eisenhower, así como los de un crucero con misiles guiados y dos destructores que acompañan al portaaviones desde octubre de 2023, se enfrentaron al combate marítimo más intenso desde la Segunda Guerra Mundial. Los marineros derribaron unos 150 drones armados y misiles lanzados desde Yemen hacia los barcos en las rutas de navegación del Mar Rojo. Los del Roosevelt pronto podrán experimentar algo de eso.
Otros dicen que la acción en el Mar Rojo es la primera batalla naval estadounidense del siglo XXI. En respuesta a los ataques de los hutíes, el Eisenhower lanzó ataques aéreos contra las posiciones de los rebeldes en Yemen. Associated Press estima que la Marina ha gastado al menos mil millones de dólares en armamentos para luchar en el Mar Rojo.
En la Marina, uno recibe una lección de geografía y una formación en geopolítica. Por ejemplo, los hutíes, que cuentan con el apoyo de Irán, controlan la capital de Yemen, Saná, desde 2014. Han lanzado más de 60 ataques contra buques específicos y han disparado otros misiles y drones, según AP. Han capturado un buque y hundido dos desde noviembre de 2023.
Los funcionarios del Comando Central de Estados Unidos, con sede en Tampa, Florida, que está a cargo de las fuerzas militares en la región, dijeron que los pilotos de los cazas F/A-18 de la Marina del Eisenhower registraron más de 30.000 horas de vuelo mientras el portaaviones navegaba más de 50.000 millas. Los marineros del portaaviones rescataron a tripulaciones de mercantes en apuros en varias ocasiones.
La misión en el Mar Rojo también ha sido solitaria para los marineros. El Eisenhower y sus barcos aliados hicieron una breve escala en Grecia durante la rotación. El buque ha sido el portaaviones más desplegado de toda la flota estadounidense en los últimos cinco años, según un análisis del Instituto Naval de Estados Unidos.
Al conmemorar el nacimiento de la nación, debemos recordar que, al finalizar la Guerra de la Independencia, la Armada se disolvió y resurgió con la Ley Naval de 1794, que creó una Armada estadounidense permanente.
El motivo fue que los barcos mercantes se vieron amenazados en el mar Mediterráneo por piratas berberiscos del norte de África. Para los navegantes actuales en el mar Rojo, su saga continúa este 4 de julio.
Charles Selle es un ex reportero, editor político y editor de News-Sun.
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