Tras dejar un rastro de destrucción en el Caribe oriental, el huracán Beryl se dirigió a toda velocidad hacia los puntos turísticos más populares de México, en la península de Yucatán, la madrugada del viernes, lo que llevó a las autoridades del país a emitir una alerta roja. “Las cosas materiales se pueden recuperar. Lo más importante es la vida”, escribió el presidente saliente de México, Andrés Manuel López Obrador, en las redes sociales, al tiempo que instaba a la población a acudir a los refugios contra tormentas.
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