Kilian Jornet hizo historia. Se superó a sí mismo y a todos los demás. Consiguió algo que nunca alguien había logrado jamás: batir el récord de subir los 82 picos de más de 4.000 metros en los Alpes en solo 19 días. Cuando en 2008 se había hecho en 60. Un hito que aún tiene más mérito teniendo en cuenta que lo logró ayudándose únicamente de su capacidad física, escalando, caminando o en bicicleta.
“Es difícil de procesar todas mis emociones ahora mismo, pero este es un viaje que nunca olvidaré“, declaró emocionado. El reto tomó 267 horas para superar 1.200 kilómetros y 16 etapas.
Y es que gran parte de su éxito se debe al ’empujón’ que dio en Montblanc. Ascendió 16 nuevas cumbres, dejando atrás 41 kilómetros. Todo ello sin apenas descanso, dado que había dormido unas cuatro horas. Después de esa heroicidad, tenía su objetivo muy cerca. Solo le quedaba batir el ‘Grand Paradiso’.
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Todo empezó en Piz Bernina, allí se originó este aventura llamaba ‘Alpine Connections’. Lo hacía pocos días después de su participación en la carrera de Sierre-Zinalen Suiza. Realmente, no se marcó los tiempos, sino que se fue marcado pequeños objetivos que podía superar si el tiempo, el cansancio mental y el físico estaban de su lado y del de su equipo.
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Se trata del desafió “más difícil” que ha llevado a cabo en toda su vida. Para lograrlo, tuvo que dejarse la piel “mental, física y técnicamente” hablando. Eso sí, también considera que ha sido el viaje más bonito.
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