“Las fuerzas de defensa aérea destruyeron más de una docena de misiles de crucero y alrededor de una docena de misiles balísticos y un avión no tripulado de ataque en el cielo sobre Kiev”, dijo Serhiy Popko, jefe de la administración militar de la ciudad de Kiev, en un comunicado matutino del lunes.
Según Popko, el ataque provocó varios incendios y escombros en cuatro distritos de Kiev. Dos personas resultaron heridas.
Kiev no fue el único objetivo de las fuerzas del presidente ruso Vladimir Putin durante la noche.
En total, las tropas rusas lanzaron 35 misiles de crucero y balísticos y 23 drones contra las regiones de Kiev, Járkov y Sumy. La Fuerza Aérea ucraniana informó haber derribado 22 misiles y 20 drones.
En Sumy, una región fronteriza con Kursk, Rusia, donde Ucrania está llevando a cabo su propia incursión transfronteriza, las fuerzas rusas atacaron un centro de rehabilitación social y psicológica de huérfanos, informó la administración militar local.
“En ese momento no había niños en la institución, pero 18 residentes de las casas cercanas resultaron heridos, entre ellos seis niños, nueve mujeres y tres hombres”, informó la fiscalía local.
Tras ser repelido el ataque en Kiev, el sonido de la música sustituyó a las explosiones mientras cientos de niños volvían a la escuela, celebrando el inicio de otro año de estudios.
“Para todo habrá una respuesta. El enemigo lo notará”, escribió en su página de Telegram el jefe de la Oficina del Presidente, Andriy Yermak, tras el ataque.
