Amazon está dando otro aumento salarial a sus conductores de reparto subcontratados en EE. UU. en medio de una creciente presión sindical.
Los conductores que trabajan con los socios de servicios de entrega de Amazon, o DSP, ganarán un promedio de casi $22 por hora, un aumento del 7% respecto del promedio anterior de $20,50, dijo la compañía el jueves.
El aumento de los salarios forma parte de una nueva inversión de 2.100 millones de dólares que el minorista online con sede en Seattle está realizando en el programa de entregas. Amazon no emplea conductores directamente, sino que depende de miles de empresas externas que entregan millones de paquetes a clientes todos los días.
La compañía también aumentó el salario de los conductores estadounidenses el año pasado. La semana pasada, también dijo que aumentaría los salarios de los trabajadores de primera línea en el Reino Unido en un 9,8% o más.
Amazon dijo que el programa DSP ha creado 390.000 puestos de trabajo para conductores desde 2018 y que sus inversiones totales de 12.000 millones de dólares desde entonces ayudarán con los programas de seguridad y brindarán incentivos a las empresas participantes.
Los reguladores laborales de Estados Unidos están poniendo más escrutinio en el modelo de negocios de Amazon, que ha puesto una capa de separación entre la empresa y los trabajadores que conducen sus omnipresentes furgonetas gris-azules.
Los Teamsters y otros grupos laborales han argumentado que Amazon ejerce un gran control sobre la fuerza laboral subcontratada, incluso determinando sus rutas, fijando objetivos de entrega y monitoreando su desempeño. Dicen que la empresa debería ser clasificada como un empleador conjunto a los ojos de la ley, a lo que Amazon se ha resistido.
Una semana después de que la junta laboral dijera que algunos conductores de reparto de terceros son empleados de Amazon, los Teamsters dicen que más conductores en Skokie se están organizando
Sin embargo, los reguladores laborales se están poniendo cada vez más del lado de la empresa.
La semana pasada, un fiscal de la Junta Nacional de Relaciones Laborales de Atlanta determinó que Amazon debería ser considerada responsable conjunta por supuestamente haber hecho amenazas y otras declaraciones ilegales a los conductores de DSP que buscaban sindicalizarse en la ciudad. Mientras tanto, los fiscales de la Junta Nacional de Relaciones Laborales de Los Ángeles determinaron el mes pasado que Amazon era un empleador conjunto de conductores subcontratados que entregaban paquetes para la empresa en California.
Si no se llega a un acuerdo en esos casos, la agencia podría optar por presentar una denuncia contra Amazon, que se litigaría dentro del sistema de derecho administrativo de la NLRB. Amazon tiene la opción de apelar la orden de un juez ante la junta directiva de la agencia y, eventualmente, ante un tribunal federal.
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