En respuesta a preguntas sobre la afirmación del FBI de que Irán ha interferido en las elecciones estadounidenses mediante piratería informática, el representante de Teherán la rechazó por ser completamente infundada y “carece de cualquier validez o legitimidad”.
Refutando la participación de Irán en las disputas internas de Estados Unidos, la misión agregó, como se ha afirmado repetida y claramente, que Irán no ha tenido ni tiene ningún motivo o intención de interferir en las elecciones estadounidenses.
El representante iraní pidió al gobierno de Estados Unidos que proporcione de manera formal y transparente pruebas documentadas relacionadas con las afirmaciones, señalando que hacer esas afirmaciones infundadas desacreditará aún más a Estados Unidos.
