Según los informes, un iPhone fue descubierto intacto después de ser succionado fuera de un Boeing 737 Max 9 de Alaska Airlines que sufrió una falla en el enchufe de la puerta en un vuelo con destino al sur de California.
El dispositivo fue encontrado todavía operativo en un vecindario de Washington por alguien que estaba caminando y lo vio debajo de un arbusto en la hierba húmeda.
Muchos se sorprendieron al ver que el teléfono se veía en relativamente buenas condiciones a pesar del dramático viaje que había realizado, y algunos señalaron que sus propios teléfonos se habían hecho añicos al caer distancias cortas.
Un físico le dijo a The Daily Mail que la resistencia del viento probablemente ralentizó el descenso del teléfono y la combinación de arbustos densos y hierba suave y húmeda probablemente ayudó a que el dispositivo aterrizara relativamente ileso.
Añadió que si el teléfono hubiera sufrido probablemente daños catastróficos si hubiera impactado una superficie dura como concreto o asfalto.
