VINHEDO, Brasil (AP) — Un avión de pasajeros con 61 personas a bordo se estrelló el viernes en una comunidad residencial cerrada en el estado de Sao Paulo, Brasil, matando a todos a bordo y dejando restos humeantes, dijeron funcionarios y la aerolínea.
Las autoridades no dieron información inmediata sobre víctimas en el lugar del accidente en la ciudad de Vinhedo, a unos 80 kilómetros (50 millas) al noroeste de Sao Paulo, pero testigos en el lugar dijeron que no hubo víctimas entre los residentes del barrio.
La aerolínea VOEPASS informó que el bimotor turbohélice ATR 72-500 se dirigía al aeropuerto internacional Guarulhos de Sao Paulo con 57 pasajeros y 4 tripulantes a bordo cuando se estrelló en Vinhedo. En un comunicado anterior se había dicho que viajaban 58 pasajeros.
“La compañía lamenta informar que las 61 personas que iban a bordo del vuelo 2283 fallecieron en el lugar del accidente”, dijo VOEPASS en un comunicado. “En este momento, VOEPASS está dando prioridad a la prestación de asistencia sin restricciones a las familias de las víctimas y colaborando eficazmente con las autoridades para determinar las causas del accidente”.
En un evento en el sur de Brasil, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva pidió a la multitud que se pusiera de pie y observara un minuto de silencio mientras compartía la noticia.
Los bomberos, la policía militar y la defensa civil del estado enviaron equipos al lugar. El secretario de Seguridad Pública de Sao Paulo, Guilherme Derrite, habló con los periodistas y confirmó que no se encontraron supervivientes. También dijo que se encontró la caja negra del avión, aparentemente intacta.
“Pensé que iba a caer en nuestro patio”, dijo a los periodistas una vecina y testigo que sólo se identificó como Ana Lucía cerca del lugar del accidente. “Fue aterrador, pero gracias a Dios no hubo víctimas entre los vecinos. Sin embargo, parece que las 62 personas que iban dentro del avión fueron las verdaderas víctimas”.
Un video obtenido por The Associated Press de un transeúnte y verificado muestra al menos dos cuerpos esparcidos entre los restos del avión en llamas.
La cadena de televisión brasileña GloboNews mostró imágenes aéreas de una zona en la que salía humo del fuselaje destrozado de un avión. Imágenes anteriores de GloboNews mostraban al avión cayendo en picada.
Flightradar24 dijo que los datos enviados desde el avión indicaron que estaba volando a una velocidad de entre 8.000 y 24.000 pies por minuto en los últimos 60 segundos del vuelo.
El Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aéreos de la Fuerza Aérea Brasileña dijo en un comunicado que los pilotos no respondieron a las llamadas del control de tráfico aéreo en Sao Paulo, ni pidieron ayuda ni dijeron que estaban operando en condiciones climáticas adversas.
En un comunicado separado, la Policía Federal de Brasil dijo que ya había comenzado su investigación y que está enviando especialistas en accidentes aéreos y en la identificación de víctimas de desastres para ayudar.
El personal de VOEPASS en el aeropuerto de Guarulhos dijo a la AP que la compañía está notificando a los familiares de las víctimas y apoyándolos en una sala privada en el aeropuerto.
El fabricante de ese avión, la franco-italiana ATR, dijo en un comunicado que había sido informado de que el accidente involucraba al ATR 72-500, y que los especialistas de la compañía están “plenamente comprometidos para apoyar tanto la investigación como al cliente”.
El ATR 72 se utiliza generalmente en vuelos cortos. Los aviones son construidos por una empresa conjunta de Airbus en Francia y Leonardo SpA de Italia. Los accidentes con varios modelos del ATR 72 han causado 470 muertes desde la década de 1990, según una base de datos de la Red de Seguridad Aérea.
El accidente de Yeti Airlines en el que murieron 72 personas en Nepal en enero de 2023 fue el de un ATR 72-500. La causa fue un error humano, una colocación accidental de ambas hélices en posición de bandera.
El barrio de Capela, donde se estrelló el viernes el avión, se encuentra en un distrito alejado del centro de la próspera ciudad de 77.000 habitantes. El avión había partido de Cascavel, en el estado de Paraná.
