Un juez de Texas le ordenó al ex corredor de la NFL Adrian Peterson que entregue sus bienes personales para ayudar a pagar una deuda que ha aumentado a más de 12 millones de dólares.
Un síndico designado por el tribunal ha estado tratando de cobrarle dinero a Peterson como parte de una sentencia de una demanda interpuesta contra el corredor cuatro veces All-Pro por un préstamo de 5,2 millones de dólares que no pagó a una compañía de préstamos de Pensilvania. Los intereses y las comisiones hicieron que esa deuda se duplicara.
El receptor, Robert Berleth, pidió a un juez en julio que ordenara que los agentes lo acompañaran a la casa de Peterson en el suburbio de Missouri City, en Houston, para que pudiera inventariar los activos que puedan venderse.
“El síndico solicita el acompañamiento de un agente de policía cuando embarga los numerosos activos que se sabe que están almacenados en (la casa) para mantener la paz y evitar interferencias con los deberes del síndico”, dijo Berleth en un expediente judicial.
El juez emitió el lunes una orden judicial concediendo esa solicitud.
Los abogados de Peterson no respondieron de inmediato a los correos electrónicos solicitando comentarios el martes.
En febrero, sus abogados presentaron documentos judiciales pidiendo que se impidiera a Berleth subastar varios artículos confiscados de unidades de almacenamiento, incluido el trofeo de “Novato del Año” de la NFL de 2007 de Peterson.
Más tarde ese mes, un juez ordenó a Berleth que detuviera la venta de los artículos de las unidades de almacenamiento de Peterson.
Peterson fue seleccionado siete veces para el Pro Bowl durante los 10 años que pasó con los Vikings y en 2012 fue nombrado el jugador más valioso de la NFL por la Associated Press. Después de dejar Minnesota, jugó para otros seis equipos, entre ellos Arizona, New Orleans, Washington y Detroit.
