Un hombre entre las docenas de personas acusadas de violar a una francesa mientras estaba inconsciente por instigación de su marido aceptó los cargos el jueves 19 de septiembre, diciendo que no creía que fuera abuso, pero luego se dio cuenta de que “algo andaba mal”.
El acusado, un empleado de supermercado de 44 años y padre de tres hijos, se encuentra entre los 50 hombres acusados de participar en la violación en masa de Gisèle Pelicot durante una década, en un juicio que ha conmocionado a Francia. El entonces marido de la mujer, Dominique Pelicot, ha admitido haberla drogado hasta dejarla inconsciente e invitado a desconocidos a violarla.
El hombre, identificado únicamente como Lionel R., admitió ante el tribunal que efectivamente había violado a Gisèle Pelicot el 2 de diciembre de 2018, aunque dijo que esa no había sido su intención. “Como nunca obtuve el consentimiento de la señora Pelicot, no tengo más opción que aceptar los hechos”, declaró ante el tribunal.
Lionel R. declaró ante el tribunal que había contactado a través de un sitio web libertino con Dominique Pelicot, quien le sugirió tener relaciones sexuales con su esposa. Describió la propuesta de Pellicot como “algo un poco fuera de lo común”.
Lionel R., que en aquella época era un miembro activo del ambiente swinger, dijo que las explicaciones de Pelicot “no fueron muy claras”, pero que creía que estaba participando en un juego. “Hablaban de drogas médicas. A veces, de que ella las tomaba y, a veces, de que él se las administraba”, dijo. “No me hice demasiadas preguntas”, añadió.
Pelicot le envió fotografías de su esposa desnuda en el jardín de la pareja, dijo. “Nunca imaginé que ella no podría ser parte de este juego. Ese fue mi primer gran error”, dijo Lionel R.
Tras llegar a la casa de la pareja, entró en el dormitorio donde Gisèle Pelicot yacía inconsciente y la penetró. “Seguí sus instrucciones, se puso muy insistente”, dijo Lionel R. sobre Dominique Pelicot. “No busco excusas. Perdí el rumbo”.
En un momento dado, Gisèle Pelicot empezó a moverse. “Me dijo que saliera de la habitación y entonces me di cuenta de que algo no iba bien”, explicó.
Lionel R., que pasó 12 meses detenido durante la investigación preliminar y ahora está divorciado, dijo de Gisèle Pelicot que “no puedo imaginar la pesadilla que vivió y que todavía vive”. Su propia vida, dijo, “también quedó destruida”.
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Gisèle Pelicot, quien obtuvo el divorcio en agosto, se ha convertido en un ícono feminista desde que exigió que el juicio sea abierto al público para crear conciencia sobre el uso de drogas para cometer abusos sexuales.
El proceso ha horrorizado a Francia, también porque entre los 50 acusados junto a Dominique Pelicot hay hombres aparentemente comunes como un bombero, una enfermera y un periodista, muchos de ellos con familia.
Diecisiete de ellos se encuentran detenidos, al igual que el propio Pelicot, pero otros 32 acusados comparecen en libertad. Un coacusado, que sigue prófugo, está siendo juzgado en ausencia.
