El número de personas muertas en las explosiones en los buscapersonas utilizados por miembros de Hezbolá el 17 de septiembre y en las radios el 18 de septiembre en el Líbano aumentó a 37. Casi 3.000 personas resultaron heridas en los ataques perpetrados por Israel. El número de miembros de Hezbollah que murieron en los conflictos entre Israel y Hezbollah desde el 8 de octubre de 2023 aumentó a 478 después de los últimos ataques. Tras los ataques a buscapersonas y radios israelíes, en la prensa de muchos países se discutieron cuestiones de seguridad y la seguridad de los productos fabricados por empresas israelíes.
ELLOS MISMOS FUNDARON LA COMPAÑÍA
La administración sionista israelí detonó por primera vez los buscapersonas modelo AP924 producidos por la empresa Gold Apollo, con sede en Taiwán. Según el New York Times, Israel probablemente fundó la propia empresa con sede en Budapest y cargó las bombas en los dispositivos. El 18 de septiembre, Israel detonó radios que se cree pertenecían al fabricante japonés ICOM Inc. Se cree que Israel vendió estas radios a Hezbollah como si fueran producidas por una empresa japonesa. Se informó que Israel creó hace años dos empresas falsas e invirtió millones de dólares en el ciberataque, que la prensa estadounidense comparó con un caballo de Troya. Se afirmó en las noticias de Al Jazeera que las redes de la cadena de suministro comenzaron a ser cuestionadas después de los hechos.
‘LOS ATAQUES ‘ESTA CONTRA EL DERECHO INTERNACIONAL’
El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, dijo que se necesita un mecanismo de control para evitar que los dispositivos utilizados por civiles se conviertan en armas. El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá hoy para tratar la ola de explosiones en el Líbano. Mientras tanto, también se afirma que el ciberataque de Israel tiene como objetivo difundir el terrorismo. El profesor de la Universidad de Nottingham Trent, Dr. Luigi Daniele decía: “Si se elimina ideológicamente la presunción de inocencia de una sociedad, se aplica la lógica utilizada por los terroristas”. El profesor de la Facultad de Derecho Osgoode de la Universidad de York, Dr. Heidi Matthews dijo: “Hay serias razones para concluir que el ataque tenía como objetivo sembrar el terror entre la población civil”.
