Un misil disparado desde Yemen impactó un buque de carga de propiedad estadounidense frente a la costa de Yemen en el Golfo de Adén, menos de un día después de que los rebeldes hutíes de Yemen dispararan un misil de crucero antibuque hacia un destructor estadounidense en el Mar Rojo, dijeron funcionarios. .
Las sospechas recayeron inmediatamente sobre los hutíes, respaldados por Irán, aunque los rebeldes no reconocieron de inmediato haber llevado a cabo el asalto al M/V Gibraltar Eagle, un granelero. Fue el último ataque que afectó al transporte marítimo mundial en medio de la guerra de Israel con Hamás en la Franja de Gaza.
Los hutíes han atacado ese corredor crucial que une los envíos de carga y energía de Asia y Medio Oriente al Canal de Suez y luego a Europa debido a la guerra, ataques que amenazan con convertir el conflicto en una conflagración regional.
Golpe ‘de babor’
Las Operaciones de Comercio Marítimo del Reino Unido, que supervisan las aguas de Medio Oriente, dijeron que el ataque del lunes ocurrió a unos 177 kilómetros al sureste de Adén. Dijo que el capitán del barco informó que “el costado de babor del barco fue alcanzado desde arriba por un misil”.
Las firmas de seguridad privada Ambrey y Dryad Global dijeron a The Associated Press que el barco era el Eagle Gibraltar, un granelero con bandera de las Islas Marshall.
El barco es propiedad de Eagle Bulk, una empresa con sede en Stamford, Connecticut, que cotiza en la Bolsa de Nueva York. La firma no respondió a repetidas solicitudes de comentarios.
Los datos de seguimiento por satélite analizados por AP mostraron que el Eagle Gibraltar se dirigía al Canal de Suez, pero rápidamente giró en el momento del ataque.
La Quinta Flota de la Marina de los EE.UU. con base en Medio Oriente no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Los rebeldes hutíes de Yemen no reconocieron ningún ataque, aunque ya han disparado misiles en esa zona anteriormente.
El ataque del domingo contra el buque de guerra estadounidense también marcó el primer fuego por parte de los hutíes reconocido por Estados Unidos desde que Estados Unidos y las naciones aliadas comenzaron los ataques el viernes contra los rebeldes, luego de semanas de ataques a la navegación en el Mar Rojo.
No quedó claro de inmediato si Estados Unidos tomaría represalias por los últimos ataques, aunque el presidente Joe Biden ha dicho que “no dudará en tomar medidas adicionales para proteger a nuestra gente y el libre flujo del comercio internacional según sea necesario”.
El fuego hutí del domingo se dirigió en dirección al USS Laboon, un destructor que opera en el extremo sur del Mar Rojo, dijo el Comando Central del ejército estadounidense en un comunicado.
Los hutíes tampoco reconocieron de inmediato ese ataque.
El misil provino de cerca de Hodeidah, una ciudad portuaria del Mar Rojo controlada durante mucho tiempo por los hutíes, dijo Estados Unidos.
“Un misil de crucero antibuque fue disparado desde zonas militantes hutíes de Yemen respaldadas por Irán hacia el USS Laboon”, dijo el Comando Central. “No se reportaron heridos ni daños”.
Golpear posiciones hutíes
El primer día de ataques liderados por Estados Unidos el viernes afectó a 28 lugares y a más de 60 objetivos con misiles de crucero y bombas lanzadas por aviones de combate, buques de guerra y un submarino. Los sitios afectados incluyeron depósitos de armas, radares y centros de comando, incluso en áreas montañosas remotas, dijo Estados Unidos.
Los hutíes aún no han reconocido la gravedad de los daños causados por los ataques, que, según dijeron, mataron a cinco de sus soldados e hirieron a otros seis.
Las fuerzas estadounidenses continuaron con un ataque el sábado contra un sitio de radar hutí.
El transporte marítimo a través del Mar Rojo se ha ralentizado debido a los ataques. La Armada de Estados Unidos advirtió el viernes a los buques con bandera estadounidense que se mantuvieran alejados de las zonas alrededor de Yemen en el Mar Rojo y el Golfo de Adén durante 72 horas después de los ataques aéreos iniciales.
Los militantes hutíes en Yemen juraron venganza contra los ataques aéreos estadounidenses y británicos, pero el presidente Joe Biden advirtió que si los hutíes continúan atacando el transporte marítimo comercial del Mar Rojo, también lo haría la respuesta.
Por su parte, los hutíes alegaron, sin proporcionar pruebas, que Estados Unidos atacó un lugar cerca de Hodeida el domingo aproximadamente al mismo tiempo que el lanzamiento del misil de crucero. Los estadounidenses y el Reino Unido no reconocieron haber realizado ningún ataque, lo que sugiere que la explosión pudo haber sido provocada por un misil hutí que falló.
Desde noviembre, los rebeldes han atacado repetidamente barcos en el Mar Rojo, diciendo que estaban vengando la ofensiva de Israel en Gaza contra Hamas.
Pero con frecuencia han atacado a buques con vínculos débiles o nulos con Israel, poniendo en peligro el transporte marítimo en una ruta clave para el comercio mundial.