El retiro de Dusty Baker de las Grandes Ligas no duró mucho.
Baker, de 74 años, regresa a la organización que dirigió de 1993 a 2002, luego de que los Giants lo contrataran como asistente especial tanto para las operaciones de béisbol como para la propiedad, confirmó el Bay Area News Group.
Bob Nightengale de USA Today fue el primero en informar la noticia.
Baker se retiró oficialmente de la dirección este octubre después de una ilustre carrera de 26 años. Había jugado 19 temporadas en la MLB, de 1968 a 1986, para los Bravos, Dodgers, Gigantes y Atléticos.
San Francisco fue su primera parada como directivo. Ahí es donde ayudó a dirigir a los Giants después de que la franquicia casi abandonara la Bahía, guiando el traslado del equipo desde Candlestick Park a su actual estadio frente al mar. Con la superestrella Barry Bonds, Baker ayudó a liderar el equipo que ganó el banderín de la Liga Nacional de 2002 que perdió ante los Angelinos en la Serie Mundial.
Baker, tres veces Gerente del Año, finalmente obtuvo su anillo de Serie Mundial en 2022 cuando llevó a los Astros de regreso a la cima del deporte a raíz de su escándalo de robo de señales que llegó a un punto crítico en 2019.
Un puesto en la oficina principal no será nuevo para Baker. En 2018, después de dos años dirigiendo a los Nacionales de Washington, Baker se desempeñó como asesor especial del director ejecutivo de los Gigantes, Larry Baer, durante dos años antes de dirigirse a Houston.
Baker reveló durante una entrevista en la radio local que los propietarios de los Giants habían estado en conversaciones con él sobre un posible regreso a la organización desde diciembre. Dado que Baker es nativo de Sacramento con fuertes vínculos con la franquicia, y los Giants tienen una larga historia de traer íconos de regreso a roles administrativos, es una opción natural.