Xavi, ayer, tras perder ante el Madrid / VALENTÍ ENRICH
El presidente del Barça, Joan Laporta, no salió nada satisfecho de la clamorosa derrota en la Supercopa con el Madrid. De hecho, su enfado era mayúsculo atemperado ya con las horas que han pasado desde el pitido final. Laporta es claramente el que toma decisiones en este Barça. Escucha, delega, se informa y le aconsejan, pero finalmente quien actúa es él. Y con Xavi no pasará nada.
Laporta tiene la convicción de que el técnico sigue siendo la persona ideal para seguir con las riendas del equipo. Internamente, el entrenador no tiene todos los apoyos, pero sí mantiene el más importante con Laporta decidido a que acabe la temporada pase lo que pase. El Barça está en un bache de juego y ahora también de resultados, pero el presidente tiene mucha experiencia y sabe que esto es muy largo. Ven difícil hacer algo en la Champions, pero el objetivo es ganar la Liga y la Copa y hay tiempo para lograrlo. Y las notas llegarán a finales de temporada con Xavi hasta el 30 de junio con total seguridad.
La confianza entre Xavi y Laporta es mutua y el entrenador ya ha dejado claro que él no será ningún problema para el Barça en el futuro si, finalmente, se decide prescindir de sus servicios. Xavi siempre ha recordado que en el Barça un entrenador está obligado a dar resultados y entendería perfectamente que el próximo verano se pueda abrir un debate en el caso de que la temporada acabe en blanco.
Fruto de esa confianza llegó la renovación del entrenador con cláusulas de salida cada verano, lo que facilitaría las cosas en el caso de decisiones drásticas. Y el técnico también ha sido claro asegurando que no será un problema si debe apartarse porque la directiva no confía en su proyecto. Es un barcelonista más y quiere lo mejor para la entidad.
Xavi Hernández durante la final de la Supercopa de España 2024 / Valentí Enrich
Todavía no se ha llegado a ese escenario. Queda muchísimo. El Barça, jugando mal, ha sido capaz de llegar a los octavos de la Champions, está a siete puntos del líder en la Liga y tiene un camino por ahora fácil en la Copa. Vaya, que sus opciones se mantienen totalmente abiertas a la espera de encontrar una mejor línea de juego que acabe por asentarse con buenos resultados.
De todas estas competiciones, la Liga está marcada como principal y gran objetivo y Xavi irá a por todas intentando recortarle al Madrid lo antes posible. El club le dará facilidades -están trabajando para fichar en enero- y tanto internamente como públicamente el discurso de la continuidad del entrenador se va a defender sin matices. A Laporta le gustaría que Xavi pudiera encarrilar la temporada para mantenerle en sus años de mandato en el banquillo, pero los próximos meses dictarán sentencia. Es cierto que la cosa no pinta bien, pero los títulos se ganan o pierden a partir de ahora. Y esto marcará el destino del entrenador.