LAS VEGAS – El entonces gerente general de los 49ers, Scot McCloughan, admiraba la máquina de tacleadas de Ole Miss por su combinación de potencia, velocidad, atletismo y agresión.
Después de una temporada de 7-9, los 49ers fueron seleccionados para entrenar a uno de los equipos del Senior Bowl en Mobile, Alabama, donde Patrick Willis fue asignado a su equipo.
“Al verlo en la universidad, nos dimos cuenta de que era especial”, dijo McCloughan a NBC Sports Bay Area. “Y en el Senior Bowl, identificamos que la persona era tan buena como el jugador”.
A pesar de la oposición de algunos de los entrenadores del equipo en ese momento, McCloughan seleccionó a Willis con la selección general número 11 en el Draft de la NFL de 2007.
El jueves, el viaje futbolístico de Willis se completó con su selección en la Clase 2024 del Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional.
Willis fue elegido para el honor individual más prestigioso del fútbol en su quinto año de elegibilidad y su tercera vez como finalista.
Junto a Willis en la Clase 2024 del Salón de la Fama de siete miembros se encuentran el ala defensiva Dwight Freeney, el especialista en devoluciones Devin Hester, el receptor abierto Andre Johnson y el ala defensiva Julius Peppers de la era moderna.
El liniero defensivo Steve McMichael y el apoyador externo Randy Gradishar fueron elegidos del grupo de mayores.
El ex receptor de los Raiders, Art Powell, y el entrenador Buddy Parker fueron finalistas en las categorías senior y entrenador, pero no recibieron el voto obligatorio del 80 por ciento para la elección.
El honor de Willis llega en un momento fortuito, cuando los 49ers se preparan para jugar el Super Bowl LVIII contra los Kansas City Chiefs. Después de todo, Willis todavía tiene un impacto con los 49ers.
El gerente general John Lynch dijo que le pide a Willis que venga al equipo con más frecuencia debido a su influencia positiva sobre los jugadores actuales.
“Tiene una manera especial de ser que inspira a la gente”, dijo Lynch.
Willis se ha unido a los apoyadores de los 49ers, Fred Warner y Dre Greenlaw.
“Comenzamos a conectarnos y hablar”, dijo Warner a NBC Sports Bay Area la semana pasada. “Él no me ha mostrado nada más que amor. Y, obviamente, ese es uno de mis modelos de excelencia en la posición de apoyador; o olvídense de la posición, se habla de jugar fútbol americano de la manera correcta”.
Willis hablaba suavemente y no se sentía cómodo con un papel de liderazgo cuando llegó a la NFL. Pero con el tiempo, Willis se colocó en posiciones incómodas para asumir un papel más destacado porque sabía que se esperaba más de él como apoyador central del equipo.
“Jugó con una pasión única”, dijo Lynch. “Se notaba que sus compañeros respondieron y la multitud respondió a la forma en que jugó”.
Willis fue un All-American consensuado del primer equipo en 2006 y ganó el premio Butkus y el premio Jack Lambert como el mejor apoyador universitario del país. Fue el Jugador Defensivo del Año de la SEC en 2006 y fue incluido en el Salón de la Fama del Fútbol Americano Universitario en 2019.
Willis jugó toda su carrera de ocho años en la NFL con los 49ers antes de que problemas crónicos en los pies lo obligaran a retirarse después de la temporada 2014. Durante sus siete temporadas completas en la NFL, Willis obtuvo siete honores de Pro Bowl y fue cinco veces seleccionado All-Pro del primer equipo.
Willis lideró la NFL con 174 tacleadas en su primera temporada como profesional y fue nombrado Novato Defensivo del Año de la NFL. Fue incluido en el equipo All-Decade de la NFL de la década de 2010.
“Tenía una habilidad e instintos únicos como apoyador interno y su velocidad de juego era fenomenal”, dijo McCloughan. “Cambió la posición de apoyador interno para esa generación. Todos los equipos observaron esa posición y dijeron: ‘Necesitamos velocidad; necesitamos velocidad; Necesitamos velocidad.’ “
Lo que también hizo especial a Willis fue su increíble agilidad y su alcance de banda a banda junto con su habilidad para golpear.
Como novato, le dio un golpe aplastante al corredor novato de Minnesota, Adrian Peterson, al comienzo de un juego en Candlestick Park.
Willis marcó la pauta en un día en que Peterson tuvo el peor juego de su carrera en el que terminó con 14,918 yardas para ocupar el quinto lugar en la historia de la NFL. Peterson ganó sólo 3 yardas en 14 intentos terrestres ese día, mientras que Willis tuvo ocho tacleadas y recuperó un balón suelto.
“Sé que todos los jugadores que jugaron con Patrick lo respetaron mucho, y sé que todos los jugadores que alguna vez jugaron contra Patrick lo respetaron mucho”, dijo McCloughan. “Esa es la definición de un jugador del Salón de la Fama”.
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