Metalu eleva en las piscinas la felicidad de personas con movilidad reducida

“Era el año 1996, y un día escuché por casualidad que iba a implantarse en países como España una normativa para establecer la obligatoriedad de hacer accesibles las piscinas. Pocos días después, fui a una piscina municipal, había una chica que padecía espina bífida, y constaté las grandes dificultades que tenían los padres para meterla en el agua y para sacarla. Y lo beneficiosa que era para ella darse un baño. También me impactó ver lo contenta que se sentía dentro de la piscina con su grupo de amigas. Era una más, se sentía motivada y libre. Como emprendedores, pensé que había hueco para nosotros si dábamos soluciones a esas personas”. Así recuerda Manuel Escalera la génesis de Metalu, la empresa que a tal fin su hermano Juan y él fundaron en 1997 en La Luisiana, y cuyos ascensores acuáticos están presentes en miles de piscinas de numerosos países, propiciando innumerables experiencias reconfortantes a personas que antaño estaban excluidas.

Fuente