Los bomberos lucharon el domingo contra incendios forestales masivos que estallaron en el centro de Chile dos días antes, mientras las autoridades extendieron los toques de queda en las ciudades más afectadas por los incendios y dijeron que al menos 64 personas murieron.
Dado que el número de muertos aumentó en 13 respecto al día anterior, el presidente Gabriel Boric dijo que es probable que la cifra aumente aún más.
“Sabemos que esa cifra va a crecer, va a crecer significativamente”, dijo Boric en un discurso televisado a la nación.
Los incendios han ardido con mayor intensidad en los alrededores de la ciudad de Viña del Mar, donde un famoso jardín botánico fundado en 1931 fue destruido por las llamas el domingo. Al menos 1.600 personas quedaron sin hogar.
Varios barrios del extremo oriental de Viña del Mar han sido devorados por las llamas y el humo, atrapando a algunas personas en sus viviendas. Las autoridades dijeron que 200 personas han sido reportadas como desaparecidas en Viña del Mar y sus alrededores. La ciudad de 300.000 habitantes es un popular balneario y también alberga un famoso festival de música durante el verano del hemisferio sur.
Los incendios posiblemente fueron provocados intencionalmente, dice el gobernador
Rodrigo Mundaca, gobernador de la región de Valparaíso, dijo el domingo que creía que algunos de los incendios podrían haber sido causados intencionalmente, repitiendo una teoría que también había sido mencionada el sábado por el presidente Boric.
“Estos incendios se iniciaron en cuatro puntos que se encendieron simultáneamente”, dijo Mundaca. “Como autoridades tendremos que trabajar rigurosamente para encontrar quién es el responsable”.
Los equipos de rescate se apresuraron a las áreas afectadas por los incendios forestales en la región de Valparaíso de Chile mientras los residentes rebuscaban entre los escombros de casas destruidas y automóviles quemados.
Los incendios alrededor de Viña del Mar comenzaron en zonas boscosas montañosas de difícil acceso. Pero se han trasladado a barrios densamente poblados de la periferia de la ciudad a pesar de los esfuerzos de las autoridades chilenas por frenar las llamas.
El sábado, el presidente dijo que las temperaturas inusualmente altas, la baja humedad y las altas velocidades del viento estaban dificultando el control de los incendios forestales, que ya han quemado 8.000 hectáreas de bosques y áreas urbanas.
Toques de queda para evitar saqueos
Las autoridades están pidiendo a las personas en las zonas afectadas por los incendios que evacuen sus hogares lo más rápido posible, mientras que a los que están más lejos de los incendios se les dice que se queden en casa para facilitar el tránsito de los camiones de bomberos y ambulancias.
Se han declarado toques de queda en Viña del Mar y las ciudades vecinas de Quilpué y Villa Alemana como parte de un esfuerzo para evitar saqueos.
Los incendios estallaron durante una semana de temperaturas récord en el centro de Chile. En los últimos dos meses, el patrón climático de El Niño ha provocado sequías y altas temperaturas en el oeste de América del Sur que también han aumentado el riesgo de incendios forestales.